Exponen que plan fiscal de EU es una oportunidad para el País. Señalan que se debe actualizar el sistema tributario nacional de acuerdo a EU
La reforma fiscal de Estados Unidos debe ser percibida por México como una oportunidad para resolver su propia estructura fiscal, hacia una que sea más amigable para el empresariado.
Así lo sugirió Larry Rubin, representante en México del partido Republicano de EU.
Este empresario estadounidense dijo que este tema debe ser crucial en la agenda de los candidatos a Presidente de la República y tiene que ser una de las primeras acciones de quien resulte ganador.
«(La reforma fiscal en EU) Va a tener un impacto enorme en las finanzas públicas de México a partir de la baja de tasas y de una mayor competitividad para ellos, y debido a esto es necesario que México emprenda de manera urgente su propia reforma fiscal, que atine para que el País sea más competitivo.
«Es una gran oportunidad para México de reformar su sistema tributario, para incrementar su base tributaria y para mantenerse competitivo en la región de América del Norte», dijo en entrevista con REFORMA.
El objetivo principal de esta modificación debe de ser apoyar al empresariado, especialmente para las pequeñas y medianas empresas para que puedan tener un mayor capital para fondear inversiones y esto permita hacer crecer el empleo.
«Debe tener una tesitura similar a la de Estados Unidos, enfocada a un mayor crecimiento de las empresas, que son el gran motor de desarrollo y crecimiento. Una reforma fiscal produciría en México un mayor número de empleo y un más grande número de empresarios dispuestos a invertir para desarrollar negocios», explicó el representante.
Sin embargo, consideró Rubin, la situación se presenta en una época complicada, ya que el País entra en un periodo electoral. Ante eso, está la posibilidad que la actual Administración haga un esfuerzo por hacer ajustes antes que su sexenio termine o que sea uno de los mayores proyectos del próximo Presidente.
«México necesita seguir moviéndose en sincronía con la región para ser más competitivo, el País sigue y seguirá siendo atractivo para los negocios, pero una reforma fiscal de esta naturaleza hace que sean necesarios cambios en el sistema tributario», indicó.
Sobre la situación en Estados Unidos, consideró que las prioridades de la actual Administración, luego de la reforma fiscal, serán la discusión sobre la reforma migratoria y una del sistema de salud, además de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC).
En noviembre de 2018, Estados Unidos también tendrá elecciones, en donde se disputarán la totalidad de la Cámara de Representantes, un tercio de los Senadores y elecciones de gobernadores y cámaras legislativas a nivel local.
Fuente: Reforma, Sección Negocios, Diciembre 12, 2017