Eliminar el cuadro básico de medicamentos que se distribuyen en el sector salud y pretender dar todo tipo de medicinas a la población trastocará la forma de hacer negocios de las farmacéuticas con el Gobierno mexicano. Para Rafael Gual, director general de la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica, dicho planteamiento hecho por el Presidente Andrés Manuel López Obrador es inviable financieramente para cualquier Gobierno e incluso podría significar una amenaza presupuestal.
«Todos los países tienen un cuadro básico. No hay país que pueda dar todos los medicamentos para todas las enfermedades porque eso tendría un costo sumamente alto. Por ejemplo, tener medicamento disponible para enfermedades raras significaría el presupuesto de miles de otras dosis de medicamentos comunes que pueden salvar vidas», señaló.
Gual detalló que la industria farmacéutica está trabajando de la mano del nuevo Gobierno federal y con el nuevo plan de salud para ofrecer las mejores condiciones en materia de venta de medicamentos, con el fin de lograr que las compras sean eficientes.
En tanto, Miguel Ángel González Block, investigador en salud de la Universidad Anáhuac, expuso que la eliminación del cuadro básico no es la vía para mejorar la atención a los pacientes.
«Coincido en la inviabilidad económica de la idea, pero sobre todo resalto la nula utilidad. Lo que es urgente es gastar más en la atención a la salud, pero no en medicamentos sino en profesionales que puedan diagnosticar y medicar correctamente para aprovechar los beneficios que ofrece el avance científico», expuso.
El especialista agregó que las farmacéuticas deberán ser obligadas a mejorar sus ventas al sector público basándose en la eficiencia de sus medicamentos, a través de resultados medibles. No obstante, insistió, ello se dificultaría con la eliminación del cuadro básico.
«Sin un cuadro básico se corre el riesgo de no tener control sobre qué medicamentos se dan a qué parte de la población y por ende se pierde la capacidad de medir los resultados», puntualizó.
Por el contrario, la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF) sostuvo en su sitio web que la propuesta del Gobierno federal abre la puerta para que cada mexicano tenga acceso al tratamiento que necesita, en el momento en que lo requiera.
Y señaló que el papel del Consejo de Salubridad General será fundamental en la operación de la iniciativa de eliminar los cuadros básicos de las instituciones de salud.
Fuente: Reforma Sección Negocios, Diciembre 19, 2018