Para que la gente tenga mayor información de los productos que está consumiendo, una alternativa es ponerles códigos electrónicos, incluso podrían ser también tipo QR, en lugar de los etiquetados frontales de advertencia, sugirió Vicente Yáñez, presidente de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD).

Grupo REFORMA publicó ayer las inquietudes que genera en fabricantes de alimentos y bebidas y en la ANTAD la iniciativa de ley que busca que los productos tengan etiquetas frontales de advertencia para combatir la obesidad.

«Una opción que me parece que puede construir más son las etiquetas electrónicas, que son más modernas… Ya hay una alternativa que se llama Infocode, que lo hace GS1, en donde se escanea el código de barras del producto y saldrá la información completa y más».

También, añadió Yáñez, se pueden desarrollar códigos QR y con los celulares el consumidor podría escanear un producto y ver más información nutrimental.

Reconoció que las etiquetas actuales son mejorables, pues, por ejemplo, tienen letras muy pequeñas, pero con un código de barras o un QR el consumidor podría tomar decisiones más informadas.

«Eso construye más, conoces más del producto, ingredientes y más de lo que no cabría en la etiqueta, eso es una cosa más inteligente».

En julio fue votado el predictamen de la iniciativa en la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, el cual propone que los productos alimenticios cuenten en la parte frontal etiquetas en blanco con semáforos negros octagonales con advertencias como «Alto en azúcares», «Alto en grasa», «Alto en sodio» y «Alto en calorías», basados en un modelo chileno implementado hace tres años.

Fuente: Reforma, Sección Negocios, Septiembre 18, 2018