Con la reforma en pensiones del Gobierno federal, habrá una segunda generación de transición que no recibirá el beneficio total de la modificación al sistema y seguirá necesitando un esquema de ahorro adicional, señaló la consultora global Willis Towers Watson.
México ya cuenta con una primera generación de transición, que es la que empezó a cotizar antes del 1 de julio de 1997; con la reforma, se originará una segunda generación que serán las personas que iniciaron su cotización al seguro social a partir de la referida fecha y hasta que las aportaciones alcancen el 15 por ciento que se plantea.
Dado que la propuesta de reforma permite una gradualidad para que las empresas eleven su aportación, la segunda generación de transición recibirá de forma proporcional el beneficio, ya que dependerá de los años que coticen bajo el nuevo esquema antes de jubilarse, explicó Jorge Alarcón, director de Retiro de la compañía.
Con esto, si el cambio inicia en 2023, que es el tiempo que se planteó, sólo los trabajadores que comiencen a cotizar a partir del 2030, año en el que se espera alcanzar el 15 por ciento de aportación, son los que obtendrán el beneficio total de esta propuesta de reforma, señaló.
El directivo destacó que esto sigue haciendo relevante el que una persona complemente los beneficios del seguro social, inclusive para las personas que coticen en 2030 porque una tasa de reemplazo de 50 por ciento seguirá siendo insuficiente.
Un plan de pensiones privado es una herramienta para la retención y atracción de talento clave para la organización.
Fuente: Reforma, Negocios, 11 agosto, 2020