Para hacer frente al entorno económico de 2023 y años posteriores, México debe estimular la inversión y mejorar su productividad, recomendó el Banco Mundial.
Si bien una recesión aún no es segura en Estados Unidos, es muy probable que su economía enfrente un crecimiento bastante moderado en 2023, lo que para México es importante puesto que es el principal socio comercial, dijo por escrito Mark Thomas, director para México, Colombia y Venezuela del Banco Mundial.Para enfrentar esta situación y el futuro, lo primero que México necesita hacer es estimular la inversión, que aún se encuentra rezagada respecto a niveles prepandemia, y para ello hay que mejorar el clima de negocios e invertir en infraestructura pública y conectividad, comentó a Grupo REFORMA.

«Esto atraería inversión privada y además se podrían aprovechar las oportunidades de nearshoring que la pandemia -y las disrupciones en las cadenas de valor- trajo», apuntó.

En su opinión, a nivel estatal, los gobiernos podrían fomentar la creación de clusters industriales a través de alianzas público-privadas.

Thomas mencionó que para el mediano plazo, México necesita mejorar su productividad.

«Es sabido que hace décadas la economía mexicana se encuentra estancada en términos de crecimiento, y la principal causa de esto es el bajísimo crecimiento en productividad», manifestó.

Recientemente, recordó, el Banco Mundial informó que la productividad agregada de México está debilitada por factores estructurales a nivel de industria y de empresa -como acceso al financiamiento, falta de incentivos para invertir en tecnología, capacidades de gestión y el entorno empresarial- que impiden el acceso de las compañías productivas a los recursos.

Añadió que las empresas deben tener más incentivos para invertir en mejorar su gerencia y organización, por ejemplo, a través de una reducción del crimen y de la corrupción.

Sobre el crecimiento económico esperado para el País este año, Thomas sostuvo que con base en algunos datos positivos que ya se han dado a conocer, el Banco Mundial puede anticipar que el crecimiento en 2022 será mejor del que había proyectado, de 1.8 por ciento.

Sin embargo, también estima que en 2023 el crecimiento en México podría estancarse y ser menor al que había estimado -de 1.5 por ciento-, debido al bajo crecimiento de la economía estadounidense.

Considera que la inflación comenzará a moderarse el próximo año, para regresar a la meta de Banxico (de 3 por ciento) al cierre.

Adelantó que el Banco Mundial actualizará las previsiones y que las publicará en enero.

Fuente: Reforma