La Coparmex local detalló que este 2023 se presenta como uno de los años más complejos por el contexto internacional y la situación nacional.

El sector privado de la Ciudad de México proyecta que para este 2023 el crecimiento de la economía local sea menor a lo que se dé a nivel nacional, rondando 1 por ciento. Además, está la posibilidad de que se concrete una mayor desaceleración, e incluso una recesión en la urbe.

En conferencia de prensa, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Armando Zúñiga Salinas, detalló que este año se presenta como uno de los más complejos por dos puntos, el contexto internacional y la situación nacional.

En el ámbito internacional destaca la posible recesión económica de Estados Unidos, así como un mayor encarecimiento de los energéticos, mientras que en el plano de México sobresale la parte inflacionaria.

Pensamos que la ubicación final de la economía dependerá del peso que tengan los efectos de la política monetaria de Estados Unidos y México sobre el crecimiento, así como la capacidad que tengamos como ciudad”, indicó.

“El Índice Nacional de Precios al Consumidor, en enero del 2022, antes de la invasión de Rusia a Ucrania, registraba ya un crecimiento anual del orden del 7.1%, en agosto la inflación llegó a un punto máximo de 8.7 %, a partir de ahí comenzó un lento descenso, cerramos el 2022 con un aumento anual del 7.82 % en el índice general y de 14.14 % en el sector de alimentos. Como lo sabemos, la inflación afecta directamente al bolsillo de todos, especialmente de las familias de más bajos recursos”, dijo.

“Para atajar la inflación, el Banco de México profundizó su política monetaria y llevó a la tasa de interés a 10.5 %, las empresas capitalinas tendremos que lidiar a lo largo del año con esta nueva realidad de un crédito más caro”, subrayó.

Añadió que han identificado que mientras a nivel nacional el porcentaje de la población con ingreso laboral inferior al costo de la canasta alimentaria se encuentra prácticamente en los mismos niveles del 2018, para el caso de la Ciudad de México aumentó de 31.4 a 35.6 por ciento.

Otro factor que suma a este contexto poco alentador, es que la Ciudad de México no ha recuperado los niveles de empleo pérdidos, ya que faltan 52,000 para alcanzar los niveles previos a la pandemia.

El líder empresarial expuso que para aprovechar el arranque de este año y evitar que las proyecciones se cumplan, como sector empresarial han desarrollado una serie de propuestas, como es continuar incentivando los beneficios fiscales del Impuesto Sobre Nómina (ISN).

“Si no se avanza decididamente en su transición hacia la formalidad, difícilmente se logrará una mejora en los ingresos y calidad de vida de los trabajadores y sus familias. En este aspecto cobra particular importancia la revisión de las cargas que pesan sobre la creación de nuevos empleos como es el ISN», refirió.

Detalló que se deben apuntalar los trabajos implementados en el año pasado, donde sobresale el decreto para condonar el ISN a los nuevos empleos creados por los micro y pequeños empresarios hasta por tres meses.

“De los 70,660 empleos generados entre marzo y diciembre, 53,178 (es decir, tres de cada cuatro) fueron creados por empresas medianas y grandes, por lo que estaremos pidiendo a las autoridades capitalinas ampliar dicho incentivo a estos sectores”, dijo.

Armando Zúñiga Salinas dijo que solicitarán al gobierno central y al Congreso local para generar “un reordenamiento inteligente de las prioridades económicas”, que incluye revisar la estrategia de reactivación local.

“Sobre todo, porque para este año 2023 existen acontecimientos de orden político que pueden impactar la marcha de la economía en la medida que se presenten decisiones distantes de la racionalidad económica o que distraigan la acción de los gobiernos locales en un entorno de incertidumbre”, recalcó.

Fuente: El Economista