Utilizar soluciones con certificaciones de seguridad, permitirá a los comercios y clientes aumentar la confianza, lealtad y presencia en el mercado.
En un mundo donde la tecnología ha evolucionado todas las industrias, la de pagos no es la excepción. Las tarjetas, las transferencias, los métodos contactless y hasta la autentificación biométrica se han vuelto cada vez más comunes, pero aún existe un grupo de la población que prefiere el dinero en efectivo, ¿por qué?
Para Héctor Meza, Director General de Ingenico México, la principales razones son el desconocimiento y la falta de confianza en el proceso digital.
Temor a robo de información financiera, estafas, así como procesos tediosos en la forma de pagar o problemas de conexión, son algunos de los factores que inhiben a las personas a realizar pagos con métodos diferentes al efectivo. La forma de vencerlo es garantizando tanto a clientes como vendedores, soluciones ágiles, transparentes y seguras, al igual que trabajar en educación sobre el tema.
“El desafío de pagos en Latinoamérica es que muchas personas y comercios siguen prefiriendo el uso de efectivo, lo que puede cambiarse con la concientización de los beneficios y las ventajas de los pagos electrónicos. Lo importante es garantizar que estas vías son 100% seguras, porque el mayor temor al pensar en ellas, es que puedan vulnerar la información de los usuarios”, explicó Héctor Meza.
A pesar de que en México 56.7 millones de personas entre los 18 y 70 años cuenta con al menos un producto financiero formal (cuenta de ahorro, seguros o créditos), solo 12% utiliza tarjetas cuando realiza compras que superen los 500 pesos, revela la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2021.
El Director General de Ingenico México señaló que con mecanismos de seguridad y certificaciones sólidas, las empresas pueden estar seguras de que sus transacciones y datos están protegidos, lo que permite generar confianza entre sus clientes y aumentar la satisfacción de compra que, a su vez, se traduce en incremento de ventas y nuevos clientes.
“Los clientes están cada vez más preocupados por la seguridad de sus datos y transacciones, por lo que saber que se utilizan soluciones que cumplen con los estándares de seguridad más altos de la industria, les brinda tranquilidad, confianza y se vuelven más leales al comercio. Es un ganar-ganar entre compradores y comercios”, destacó Meza.
Soluciones de seguridad
En 2022, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recibió 125,884 quejas contra el sector bancario por problemas en sus productos, de los cuales 61,778 fueron por estafas tradicionales como cargos no reconocidos o duplicidad de identidad. Este tipo de situaciones, son las que desmotivan a los usuarios a utilizar opciones diferentes al efectivo.
Para mejorar el panorama y avanzar en una efectiva inclusión, Meza aseguró que una parte de la solución está en el diseño de productos adecuados a las necesidades de la población, y que estén adelantados a posibles imprevistos. Por ejemplo, son fundamentales las tecnologías con múltiples capas de seguridad en todo el proceso de la solución, en la parte lógica, física y técnica que, en conjunto, detecten y prevengan actividades fraudulentas.
“En nuestro caso, incorporamos el cifrado de punto a punto (P2PE) en nuestras soluciones, con lo que la información de la tarjeta se cifra en el punto de entrada del dispositivo y se descifra solo en el procesador de pagos, lo que reduce significativamente la posibilidad de que los datos sean robados”, agregó Héctor Meza.
Para garantizar la eficacia y seguridad de la tecnología, resaltó, se debe trabajar en certificaciones nacionales e internacionales. En su caso, algunas son la certificación PCI PTS (Payment Card Industry – PIN Transaction Security), reconocida a nivel internacional, que garantiza la seguridad en transacciones con tarjeta de crédito y débito; la EMV, que avala la interoperabilidad de los pagos con tarjeta; y la de datos de nivel 1 de PCI DSS (Payment Card Industry Data Security Standard), relacionada a la gestión y protección de los datos del titular de la tarjeta.
La certificación de manejo de información sensible “Capítulo X”, la cual es requerida por la legislación mexicana y certificaciones NOM necesarias para que dispositivos electrónicos operen en el país, también se pueden encontrar en su portafolio.
“Constantemente estamos explorando nuevas tecnologías para incrementar y mejorar la seguridad y la protección de los datos del usuario. Nuestro compromiso siempre será la innovación continua y vanguardia, en el área de seguridad y privacidad”, finalizó Héctor Meza, Director General de Ingenico México.
Fuente: El Financiero