El riesgo de buscar pactos bilaterales en el marco de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) es que para poderlos negociar, tendría que denunciarse el actual acuerdo y hay riesgo de desequilibrar la estructura productiva, dijo Moisés Kalach, director del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales (CCENI). Por el momento, añadió, el Gobierno mexicano no ha hablado de diseñar una estrategia para abordar una negociación de esta clase, y si bien no dejan pasar por alto estas señales, éste no es el tema prioritario actual.
«Técnicamente no es muy fácil de hacer porque tienes que deshacer el existente primero y luego formular uno nuevo.
«Tampoco tenemos claros los incentivos de ir por un acuerdo bilateral cuando la idea de las cadenas de abasto de un producto es que puedan navegar a través de los tres países», dijo en entrevista con Grupo REFORMA.
Adicionalmente, mencionó que de presentarse una negociación bilateral, lo más probable es que la Administración estadounidense de todos modos presente estas cláusulas tóxicas que está insistiendo en la actual negociación, lo cual llevaría al mismo resultado.
De todos modos, el trabajo de la negociación del acuerdo continúa, y por el momento con todo y lo complicado de la situación, se sigue trabajando en él sin que haya habido un rompimiento.
«El ambiente se enrareció, sin duda es complicado sentarse a la mesa a negociar cuando tienes un socio que acaba de poner aranceles a tus productos y que tienes un problema de concepto muy marcado.
«Nosotros lo que estamos haciendo es que los equipos técnicos siguen trabajando, algunos temas se han visto en las mesas, pero el ritmo ha bajado de manera muy dramática», señaló el director del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales.
Ildefonso Guajardo, Secretario de Economía, confirmó que las negociaciones del Tratado de Libre Comercio no se han abandonado y que se está trabajando en la misma dinámica previa.
«México ha sido claro y Canadá lo ha sido también. El principal interés es mantener un acuerdo que ha sido benéfico para la región. Creemos que habría pérdida de valor si dejara de ser una integración trilateral», explicó.
La base del acuerdo, mencionó el funcionario, es mantener la competitividad regional, por lo cual romper el acuerdo restaría este factor.
Sin embargo, no hay fecha de probable conclusión para la renegociación. Aunque sigue habiendo comunicación entre las partes, no hay una agenda concreta para una reunión trilateral de los tres ministros.
Fuente: Reforma, Negocios, 07/06/2018