El balance de riesgos para la inflación mantiene un sesgo al alza asociado a diversos riesgos, en un entorno con un alto grado de incertidumbre, de acuerdo con las minutas de la última reunión de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico).
Un miembro de la Junta opinó que este balance es al alza inclusive considerando una tasa de referencia en un nivel de 7.5 por ciento, según el documento de la reunión en que se decidió subir en 25 puntos base la tasa referencial, a 7.5 por ciento.
Enfatizó que el balance de riesgos para la inflación debe expresarse en términos de una trayectoria esperada para la inflación y esta, a su vez, condicionarla a cierta postura de política monetaria.
Como riesgo al alza para la inflación, la mayoría mencionó la posibilidad de que se registre una depreciación de la moneda nacional en respuesta, entre otros factores, a una evolución desfavorable del proceso de negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC).
También a una reacción adversa de los mercados a las acciones de política monetaria en los EU, a condiciones más restrictivas en los mercados financieros internacionales, a la volatilidad asociada al proceso electoral de 2018 o a un estrechamiento adicional de las condiciones de holgura en la economía.
Un miembro expuso que, en su opinión, los principales riesgos para la inflación en los próximos meses y, especialmente, durante el primer semestre del año, se derivan precisamente de potenciales episodios de volatilidad en el mercado cambiario.
Otro detalló que existe incertidumbre acerca de cuándo se podría llegar a un acuerdo sobre el TLC y qué tan favorables serían las condiciones para México, y uno especificó que el riesgo de presiones sobre el peso derivadas de la renegociación del acuerdo comercial parece haberse aminorado, especialmente en el corto plazo.
La mayoría señaló que el riesgo de una aceleración de la normalización de la política monetaria en las economías avanzadas se ha incrementado, particularmente en Estados Unidos.
Uno agregó como riesgo que la postura monetaria relativa de México con la de Estados Unidos podría mostrar un fuerte deterioro y que ello implicaría que el canal de la toma de riesgos podría debilitarse de manera considerable.
Al respecto, la mayoría apuntó que, entre otros riesgos, destacan episodios adicionales de choques en los precios de los bienes agropecuarios o que se presenten presiones al alza en los precios de algunos energéticos, ya sea por incrementos en sus referencias internacionales o por ausencia de condiciones de competencia en algunos mercados.
Adicionalmente, algunos consideraron que un entorno de mayor inflación global es también un factor de riesgo al alza para la inflación en México.
En el otro extremo, en los riesgos a la baja, la mayoría coincidió en que la moneda nacional podría apreciarse en caso de que el resultado de las negociaciones del TLC sea favorable. Adicionalmente, resaltó que la actividad económica podría presentar un menor dinamismo que el anticipado.
La mayoría recalcó que las acciones de política monetaria que se han venido implementando para mantener ancladas las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, aunadas al cumplimiento de las metas fiscales en 2017 y al compromiso de hacerlo en 2018, así como la resiliencia que ha mantenido el sistema financiero, han contribuido a que la economía mexicana esté en mejor posición para enfrentar posibles escenarios adversos.
Por otro lado, la mayoría destacó que, si bien el balance de riesgos para el crecimiento continúa sesgado a la baja, este muestra cierta mejoría respecto del que prevalecía cuando el banco central tomó la decisión de política monetaria anterior.
En los riesgos a la baja para el crecimiento, la mayoría mencionó la incertidumbre asociada a la renegociación del TLC.
Algunos sostuvieron que los temores de un resultado adverso de las negociaciones se han atenuado pero no han desaparecido, mientras que ha aumentado la probabilidad de una negociación prolongada.
Otro advirtió que no deben descartarse los riesgos para México derivados de la disminución de las tasas del impuesto corporativo en Estados Unidos.
Con respecto a los riesgos al alza para el crecimiento, un integrante mencionó una renegociación exitosa del TLC, de modo que reactive la inversión e incluso surjan nuevas oportunidades de negocio para el sector productivo del País.
Otro señaló la expectativa de un desempeño favorable de la economía mundial.
Fuente: Reforma, Negocios, 22/02/2018