El crédito al consumo se aceleró en abril y reportó su mayor dinamismo en poco más de 11 años, desde febrero de 2013, a pesar de las altas tasas de interés.

El indicador registró un avance de 13.9 por ciento, con lo que ligó 14 meses a tasas de doble dígito, de acuerdo con cifras de los Agregados Monetarios y Actividad Financiera publicados por el Banco de México.

Al interior, destacó el crédito a los bienes de consumo duradero, cuya expansión fue de 36.5 por ciento anual real en abril, poco más del doble que registró en marzo, con 15.8 por ciento.

Este segmento fue impulsado por el repunte de 43.5 por ciento en el financiamiento automotriz, que se disparó desde el 18.9 por ciento del mes previo.

En tarjetas de crédito el crecimiento fue de 10.2 por ciento anual real en abril; en crédito personal el alza fue de 9.3 por ciento y en nómina de 5.5 por ciento.

La cartera total aumentó 5.6 por ciento anual real en abril, desde 5.7 por ciento del mes anterior.

Además del consumo, otro rubro que anotó un avance fue el otorgamiento de crédito a empresas y personas físicas con actividad empresarial, que registró un crecimiento de 2.9 por ciento, acelerándose desde 2.6 por ciento en marzo.

No obstante, el crédito en viviendas se moderó, al anotar un avance de 3.5 por ciento anual en abril, desde 3.8 por ciento de marzo.

Analistas de Banorte estiman que el crédito seguirá creciendo, aunque prevén que su avance será a menor ritmo.

«La fortaleza de los fundamentales del consumo -principalmente del empleo – y el interés de las empresas por sacar ventaja de la ola del nearshoring, todo esto en un escenario de gestión prudente por parte de los bancos y reguladores, continuará impulsando el crecimiento de los préstamos.

La institución estima que para todo el año el financiamiento de la banca acumulará un crecimiento de 6 por ciento, en términos reales.

Fuente: El Financiero, Información ,Alejandro Moscosa, P17, 03/06/2024