La cartera de crédito al consumo de la banca en México ya dio señales de reactivación en enero, al registrar un avance de 0.8 por ciento anual en términos reales.
Ese tipo de financiamiento rompió con 21 meses consecutivos de caídas; desde marzo del 2020 no se reportaba un avance, de acuerdo con datos de Banco de México.
Gracias a este avance, el crédito vigente total de la banca moderó su contracción, al caer solo 1.8 por ciento en el primer mes de este año, menor a la baja de 2.7 por ciento vista en diciembre del 2021.
Además del consumo, los préstamos a la vivienda siguieron avanzando, esta vez en 2.8 por ciento real anual, ligeramente por arriba del alza de 2.7 por ciento del mes previo; la mayor contracción se observó en el sector de electricidad, agua y gas, con 15.9 por ciento, En contraste, el financiamiento a empresas y personas físicas con actividad empresarial bajó 4.2 por ciento, con lo que acumuló 17 meses en contracción.
Analistas de Banorte enfatizaron que el avance del crédito al consumo en el primer mes del año se debe principalmente a una perspectiva económica más favorable.
No obstante, consideraron que existen riesgos que podrían mermar el dinamismo en los créditos, tales como las presiones inflacionarias vistas en meses recientes, el ciclo restrictivo de Banxico y el ritmo de mejoría en indicadores como empleo o remesas.
Carlos Gómez, analista de Intercam, señaló que el avance en el crédito al consumo se debió a que las personas buscaron fondearse en enero para poder solventar necesidades o capitalizar oportunidades para todo el año, y coincidió que los altos niveles inflacionarios podrían afectar la confianza del consumidor en las lecturas posteriores.
Fuente: El Financiero, Información ,Economía ,Guillermo Castañares, P11, 01/03/2022
