La reformulación de productos fue una salida que las grandes empresas tomaron para evitar los sellos de advertencia de sus productos, camino díficil por sus costos para pequeñas empresas.


Cd. de México México (20 junio 2021) Cumplir con el nuevo etiquetado frontal para alimentos y bebidas preenvasados no ha sido sencillo para las pequeñas y medianas empresas (Pymes).

Mientras las grandes compañías optaron por reformular sus productos casi de inmediato y evitar los sellos de advertencia, los pequeños aún no logran entender qué se necesita para cumplir con la regulación ni se han adaptado por los costos que implica.

«Para las pequeñas y medianas empresas es complicado entender qué se necesita y cómo adaptarse, están sufriendo en la implementación, el cambio de empaque, entender la norma, pedir ayuda, implica un gasto que no estaba considerado cuando ellos empezaron», Margarita Calixto, gerente general de la consultora InDex Investigación y Desarrollo de Alimentos.

Explicó que el proceso de adaptación requirió de gastos fuertes para los negocios, ya fuera en el reetiquetado de sus productos o en la reformulación de los mismos, situación que afectó de forma más acentuada a los de menor escala.

Comentó que los problemas más comunes fueron el miedo a que el consumidor rechazara su producto por tener sellos o leyendas, además de la reformulación de los productos.

Dijo que sólo algunos pequeños emprendedores tuvieron posibilidad de reformular sus productos para evitar portar sellos de advertencia.

Y es que el costo de este cambio es alto.

Por ejemplo, un tiraje de mil bolsas tiene un precio aproximado de 7 mil pesos, cifra que hace toda la diferencia para un emprendedor que debe volverlos a invertir para modificar sus empaques como exige la norma.

El 31 de mayo terminó el plazo otorgado por las autoridades oficiales para cumplir con los requerimientos.

Aquellas compañías que no acaten la disposición sobre los sellos y leyendas de advertencia, que de ostentarse habrán de eliminar el uso de personajes en sus empaques, podrían merecer diversas sanciones, desde económicas hasta la destrucción de los lotes de producto.

Como comentó a REFORMA José Hoyos, socio de la firma Baker McKenzie, si bien mientras no haya reformulaciones en los productos, mascotas, personajes y famosos ya no aparecerán en los empaques, sí podrán permanecer en su publicidad por medio de diversos canales, con una marcado enfoque en los digitales.

En tanto no haya una modificación en la regulación a la publicidad de las marcas del rubro, éstas podrán utilizar sus caricaturas y personajes en campañas publicitarias, incluso realizar colaboraciones con productos de otros giros y estar presente en sus empaques.

Fuente: Reforma, Negocios, 21 de junio, 2021