La economía mexicana se paralizó en el segundo trimestre del año, y sufrió una contracción más profunda de lo informado, según datos revisados del Producto Interno Bruto (PIB), divulgados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). De acuerdo con cifras ajustadas por estacionalidad, la actividad económica observada entre abril y junio registró cero crecimiento respecto del trimestre previo. La estimación oportuna proyectada por el Inegi hace dos semanas calculaba que la economía podía haber presentado un avance de 0.1% en el segundo trimestre.
El ajuste incorpora el registro de la actividad económica en junio, y evidencia una contracción en el desempeño de las actividades primarias, relativas a la agricultura y ganadería (-3.4%), una nueva caída en el sector industrial (-0.2%) y un mínimo avance en el sector de comercio y servicios (0.2por ciento).
En el comunicado del PIB final, el Inegi divulgó una actualización del ejercicio observado en la actividad del primer trimestre, que corresponde al periodo enero-marzo, donde precisó que la contracción fue de 0.3 puntos porcentuales, que es una caída más profunda de -0.2% informado en mayo.
«Los últimos tres trimestres han tenido variaciones de 0.1%, -0.2% y cero.
Olvidémonos si se llama recesión técnica o no.
Esta economía está estancada», describió el jefe para Latinoamérica en Credit Suisse, Alonso Cervera.
Catedráticos de la UNAM, la Universidad Panamericana y de SAVER ThinkLab, destacaron que la tendencia de la economía en los últimos cuatro trimestres es de una desaceleración que ha llegado a la parálisis.
DEMANDA DOMÉSTICA SE DEBILITA De acuerdo con información del Inegi, el avance anual durante el primer semestre del 2019 se situó en 0.2 por ciento.
Una tasa que se encuentra lejos de 1.9% alcanzado el mismo lapso del año anterior, y se convierte en el peor arranque en tres sexenios.
Antes de la gestión económica que dirige AMLO, fue el primer semestre de Vicente Fox el que terna el peor desempeño, con un avance de 0.7% a tasa anual y cifras desestacionalizadas.
El equipo de investigación económica de Banorte-Ixe destaca que este resultado fue débil y consistente con otros datos que aluden a un peor desempeño de la demanda doméstica.
Desde Londres, la consultoría global Pantheon Macroeconomics advierte que México mantiene un «decepcionante desempeño y el panorama se anticipa con importantes retos a nivel externo».
De hecho, el catedrático de la Facultad de Economía en la Universidad Panamericana, Gabriel Pérez del Peral, enfatiza que con una economía tan debilitada como la mexicana no es el mejor momento para enfrentar el impacto de una desaceleración mundial, como la que pronostica el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell.
SERVICIOS SE DEBILITAN En el detalle del comunicado, el Inegi evidencia que el sector servicios registró un avance de 0.2% respecto del trimestre inmediato anterior.
Entre los 16 componentes que integran alas actividades terciarias, 11 mantuvieron el avance y el comercio minorista arrojó el mayor crecimiento en cinco trimestres, con un avance de 1.7 por ciento.
En contraste, el componente que registró la mayor contracción, de 3.3%, resultó ser el que mide los servicios profesionales, científicos y técnicos.
Cabe destacar que es la primera caída de este segmento desde el tercer trimestre del 2017.
El director de Investigación Económica en SAVER ThinkLab, Luis Pérez Lezama, enfatiza que el desarrollo de la coyuntura económica y el desempeño del sector servicios tendrían que obligar a las autoridades a replantear su ortodoxiaeconómica.
INDUSTRIA: TERCERA CAÍDA Las actividades secundarias, donde se encuentran la industria y manufacturas, completaron la tercera caída trimestral consecutiva, al completar una contracción de 0.2% entre abril y junio.
El dato negativo completa una triada luego que en el primer trimestre cayó 0.5%, tras -1.2% observado en el último cuarto del 2018.
Pérez del Peral detalla que «la caída vertical» que mantienen la inversión y la producción industrial explica el estancamiento, «más bien la parálisis de la economía».
El segmento de la construcción fue el que registró la caída más profunda de 2.9% y la minería alcanzó un nuevo retroceso, de 1.1%, que suma 12 trimestres en contracción.
(Fuente: El Economista, Información ,Valores y Dinero ,Yolanda Morales, P14, 26/08/2019)