Hacer una inversión social en la zona en donde se está construyendo el aeropuerto en Texcoco generará oportunidades para las personas de los ocho municipios conurbados al perímetro. El 8% de los hogares de la zona no tienen refrigeradores o lavadoras, por ello es importante que se pueda aprovechar la inversión que se hará en el aeropuerto para generar vialidades, servicios seguros de agua potable, de electricidad, drenaje y alcantarillado, así como inversión en salud y educación.
El aeropuerto en Texcoco tendrá un gran impacto social y debe dársele prioridad a este impacto para que los ingresos del aeropuerto puedan generar sinergia en esa zona en donde vive una gran parte de la población que tiene necesidades en las zonas urbanas.
Una decisión como la del NAICM, que trastoque el prestigio de México tendrá impacto en la confianza de la comunidad financiera internacional en proyectos de infraestructura que el país pueda tener hacia el futuro. México requiere de muchos proyectos de infraestructura que no pueden ser financiados solo con recursos públicos o recursos públicos y privados nacionales.
La cancelación o continuación de la obra y la forma en que se cancele o apruebe generará confianza o desconfianza a nivel internacional.
Si se tomara la decisión de construir un aeropuerto en Santa Lucía tendría que estar muy bien fundamentada, en donde se vieran ventajas que hoy no se han visto. No existen estudios sobre el subsuelo, de impacto ambiental, estudios técnicos sobre la posibilidad de construir ahí un aeropuerto y falta resolver el asunto del espacio aéreo en un punto de saturación con el aeropuerto actual, y para todos estos estudios harían falta al menos tres o cuatro años para validarlos y poder tomar una decisión técnica y no política, y si la decisión fuera solamente política esto generaría muchas dudas sobre lo asertivo de la decisión y del gobierno que empieza.
Hay que tener claro que hasta el momento el proyecto de Texcoco es financiable, es sustentable, es posible y es funcional. El NAICM en Texcoco tendrá estructuras en buenas condiciones por 40 años.
Fuente: Imagen Informativa, Pascal Beltrán del Río, 19 de Septiembre, 2018