El aumento al salarlo mínimo en la frontera norte y en el resto del país debe contar con disposiciones adicionales que equilibren la carga fiscal para patrones y trabajadores, y con ello evitar distorsiones laborales, consideró Mario Morales López, vicepresidente fiscal del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP). A partir de 2019, el salario será de 102,68 pesos diarios y para la nueva Zona Económica Salarial de la frontera norte del país, de 176.72 pesos diarios, Para el experto, tener un salarlo mínimo diferenciado entre la región fronteriza y el resto del país podría generar una posible distorsión en las negociaciones laborales de las empresas.

«A nuestra consideración, debe unificarse el salario mínimo a nivel nacional», comentó Morales, quien coincide con la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

SUGERENCIAS Las recomendaciones del IMCP es que se ajusten las tablas del impuesto sobre la renta (ISR) a los salarios para neutralizar el efecto fiscal al incrementar el mínimo, así como la del subsidio al empleo para restablecer el monto neto que reciben los trabajadores con motivo también del ajuste salarial, Asimismo, Morales López dijo que deben establecerse mecanismos para moderar el costo de las cuotas al 1MSS y al Infonavit que los patrones tendrán al incrementarse el mínimo, pues dicho costo también podría verse afectado al alza.

«Desde la administración anterior hemos sugerido que se regrese la deducibilldad al 100% de las prestaciones exentas de los trabajadores, las cuales se redujeron con la entrada de la  Reforma Fiscal de 2014», sostuvo el experto.

Mario Morales enfatizó que también se corre el riesgo de que las empresas pierdan competitividad en el resto del país, frente a la disminución del IVA y el ISR que se propuso para la franja fronteriza con Estados Unidos.

Advirtió que si no hay mecanismos de definición sobre cómo aplicarán las reducciones de impuestos las empresas podrían optar por cambiar el «domicilio fiscal» y no la parte operativa a la zona fronteriza, dejando un boquete fiscal en la recaudación.

Mario Morales alertó qué muchas empresas podrían cambiar su domicilio fiscal para pagar menos impuestos.

Mario Morales López, vicepresidente fiscal del Instituto Mexicano de Contadores Públicos.

(Fuente: Excélsior, Información ,Dinero ,LINDSAY H. ESQUIVEL, P18, 28/12/2018)