Cumplir con normas que garanticen el bienestar de los trabajadores y del medio ambiente se está convirtiendo en un requisito para que proveedores mexicanos puedan formar parte de la cadena de suministro de empresas globales que están llegando al País como efecto del nearshoring.

Si bien se necesita que atiendan las especificaciones técnicas y estándares globales del producto o material que distribuyan, también es un requisito atender las normas sociales.

Marcus Berret, CEO global de Roland Berger, consultora alemana, explicó que algunas de las empresas mundiales cuando tienen un problema con un elemento de su cadena de suministro en el aspecto social, se puede convertir en una crisis internacional de manera inmediata, de ahí que crezca el interés por esos temas.

Germán Galván, socio de Roland Berger México y especialista en sectores regulados, comentó que las empresas globales están abiertas a considerar proveedores locales ubicados en México, como las pequeñas y medianas empresas (Pymes), pero éstos a su vez deben estar conscientes de que se les pedirán que cumplan con el pago del seguro social de los trabajadores, consideren temas de inclusión, diversidad de género, entre otros.

«Un jugador grande, global no va a tomar el riesgo de tener una crisis de reputación global por usar un proveedor pequeño que después resulta que no tenía contratos para su gente, que no pagaba seguridad social o que está contaminando», detalló Galván.

Marcus Berret agregó que otra de las demandas de estas compañías es la disponibilidad de energía limpia porque va a ser una de las principales condiciones, especialmente para los europeos.

Consideró que el nearshoring es un momento único para México desde una perspectiva global y debe ser aprovechado.

Fuente: Reforma, Negocios, 16 noviembre, 2023