El crecimiento de la economía global se está tambaleando ante las cada vez más intensas fricciones comerciales y las turbulencias que atraviesan los mercados emergentes, dijo este jueves la OCDE en un reporte en el que recortó sus estimaciones de expansión. La economía mundial está en vías de expandirse un 3.7 por ciento este año y el próximo, respecto al avance de 3.6 por ciento del año pasado, dijo la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
En su último informe en mayo, el organismo con sede en París había estimado un crecimiento de 3.8 por ciento para este año y de 3.9 por ciento en el 2019, pero en este reporte dijo que la actividad se ha visto afectada por otros factores desde entonces.
La OCDE afirmó que el crecimiento del comercio, el motor detrás del auge global de los últimos años, se ha desacelerado este año a cerca de 3 por ciento, desde el 5 por ciento del 2017, puesto que las tensiones entre Estados Unidos y sus principales socios comerciales están deteriorando la confianza y las inversiones.
«Los libros de pedidos por exportaciones han empezado a bajar y eso ha ocurrido durante unos pocos meses y significa que la desaceleración del crecimiento del comercio seguirá», comentó a periodistas la economista jefe de la OCDE, Laurence Boone.
«Estamos viendo el aumento del proteccionismo que está afectando nuestro panorama», agregó.
Pese a que Estados Unidos es la fuente de esas fricciones comerciales, el panorama económico para Estados Unidos fue sin embargo el mejor entre grandes economías desarrolladas de la OCDE, gracias a recortes de impuestos y al gasto gubernamental.
La OCDE mantuvo su pronóstico para el crecimiento de Estados Unidos este año sin cambios en 2.9 por ciento, pero redujo el del próximo año a 2.7 por ciento desde el 2.8 previo.
La entidad afirmó que los aranceles a las importaciones que ha impuesto y anunciado Estados Unidos están empezando a tener un impacto en la economía más grande del mundo y estima que aquellos ya aplicados elevarán los precios generales en el país entre un 0.3 y 0.4 por ciento.
La OCDE dijo que una moneda más débil ha ayudado hasta ahora a China -que no es miembro de la OCDE- a absorber el impacto de mayores aranceles estadounidenses y mantuvo sus pronósticos de crecimiento sin cambios en 6.7 por ciento para este año y en 6.4 por ciento para el próximo año.
El alza de las tasas de interés en Estados Unidos y un dólar más fuerte serán un problema para economías de mercados emergentes como Argentina, Brasil y Turquía, afirmó la OCDE, que redujo sus pronósticos para esos tres países.
No obstante, Boone dijo que la entidad no prevé que las dificultades provoquen una crisis a gran escala en mercados emergentes, como sucedió en 1998, debido a que los países manejan mejor sus finanzas ahora.
Una demanda desde el exterior más débil se traduce en que es improbable que la economía de la zona euro tenga un desempeño tan bueno como se esperaba previamente.
La OCDE redujo su pronóstico de crecimiento para la zona euro para este año a 2 por ciento, desde 2.2 por ciento, y el del próximo año de 2.1 a 1.9 por ciento.
Fuente: Reforma, Sección Negocios, 20 de Septiembre, 2018