El coordinador del Consejo Consultivo de Negocios Internacionales, Moisés Kalach, reiteró la postura de mantener la calidad en la modernización en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC), por lo que no hay prisa para terminar una negociación.
En entrevista, el integrante del Cuarto de Junto en las negociaciones del TLC dijo que tras no llegar a un acuerdo la semana anterior, no cambiará en nada el trabajo que harán, pues las fechas sólo tenían que ver en cómo se alineaba una ventana de oportunidad.
De igual forma, refirió que lo que salió a decir el presidente de la Cámara de Representantes estadounidense, Paul Ryan, quien dio como fecha límite el 17 de mayo para que se notifique el término del acuerdo, simplemente es el calendario de lo que le conviene a Estados Unidos en esta negociación.
«Nosotros, alineados con el Gobierno mexicano, hemos salido a decir que lo importante es la calidad de la negociación y, por ende, no hay prisa para terminar un acuerdo para esta semana, si no es una negociación correcta», comentó Moisés Kalach.
Por lo que la ventana sigue abierta durante toda la semana, pero la pregunta realmente es si el equipo negociador americano y el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, están dispuestos a ceder en algunas de sus condiciones, que consideran fuera de lugar.
«Creemos que fue una semana de avance, especialmente por tener todos los capítulos modernizadores listos, y que la regla de origen de autos se esté conversando de manera contante, aunque no fue del todo como quisiéramos, dado que no se movieron los puntos cruciales».
«Entonces fue una semana de avance, pero no fue una semana donde tuviéramos algo de luz en los puntos críticos de los que hemos venido platicando», refirió el empresario.
Al ser cuestionado sobre qué pasaría si no se llega a concluir el acuerdo esta semana, dijo que los procesos legislativos de los dos países son constantes; en México, el próximo senado de la República se elige el 1 julio, y entra en funciones en septiembre. Mientras que en Estados Unidos ocurre algo similar, pero ellos lo llevan hasta enero del 2019.
«En ese sentido se cierran las ventanas con los congresos que hoy tenemos en funciones, pero no se cierran realmente, sino que únicamente cambian los actores de estos congresos».
Por lo que mantener dicha postura, dijo, fue una decisión muy respetable, «poner una raya muy clara de hasta dónde estamos dispuestos a llegar y que nuestro país tenga la fuerza y la claridad de decir: de aquí en adelante no vamos a pasar, porque dañaría el interés de nuestro país, de nuestras empresas y trabajadores».
«Me parece responsable del Gobierno mexicano, estamos satisfechos con la estrategia, que es la que hemos acordado con nuestro Gobierno, y con el trabajo que han hecho el Secretario Ildefonso Guajardo y el canciller Luis Videgaray».
Resaltó que mucha gente cree que solo tenemos esta semana para lograr un acuerdo y si no termina esta semana perdemos todo lo que tenemos, pero eso es incorrecto, nos quedamos con el tratado que tenemos mientras que ninguno de los países salga.
Asimismo, comentó que las negociaciones para que el nuevo tratado concluya esta semana son compleja, e incluso ha bajado un poco la probabilidad a un 70 por ciento, «pero yo siempre me etiqueto como optimista».
Por lo que la batalla seguirá y están elaborando un nuevo plan para que a partir de la siguiente semana se redoblen esfuerzos porque esto no termina, y también tuvieron algunas acciones con sus contrapartes canadienses para tomar en cuenta que tienen cosas por hacer entre Canadá y México.
«Es muy interesante lo que está pasando, todavía no acaba esto, el calendario sigue adelante y si no cerramos algo esta semana, seguramente seguiremos en las mesas hacia adelante».
Fuente: Reforma, Sección Negocios, 14/05/2018