En julio estará listo el nuevo plan de inspecciones de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), adelantó Alejandro Salafranca, titular de la Unidad de Delegaciones Federales de la dependencia. El plan de la STPS es hacer revisiones robustas y a fondo con el fin de garantizar el trabajo digno en el país.
De acuerdo con datos de la STPS, el año pasado se realizaron 135,000 visitas de inspección en el país. Sin embargo, al tratarse de visitas, bastaba con sólo tocar la puerta para dar por cumplido el trámite. Para este año se tienen previstas 30,000 inspecciones más profundas.
«En la Secretaría del Trabajo, sobre todo en un área como la mía, donde estamos en el área de inspección de trabajo, lo que nos toca es cumplir con el marco de la ley», enfatizó Salafranca en su participación en el foro La Tercerización de Personal, Una Vía para Impulsar el Empleo Formal en México, organizado por la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH).
El funcionario destacó que hay organizaciones que usan la subcontratación para «eludir responsabilidades»; las inspecciones ayudarán a combatir esta práctica.
Salafranca advirtió también que la informalidad es uno de los mayores desafíos en materia laboral para el país.
Sobre todo porque hay trabajadores informales que son formales, dependiendo el cristal con el que se mire.
«Enseguida que pensamos en informalidad, pensamos en ambulantaje.
La informalidad es mucho más que eso.
En México gran parte de esa informalidad es legal.
Hay sectores productivos que son formales ante el SAT y son informales ante el IMSS, cuando hay masas en enormes en honorarios, asimilados a salarios, pequeños comercios, son millones de mexicanos que legalmente pagan impuestos al SAT, pero no cotizan al IMSS», explicó.
El funcionario consideró que esta situación se podría resolver con reformas legales.
El desafío mayor se encuentra en el bloque de personas que no paga impuestos ni cotiza ante el IMSS, es decir, la informalidad pura.
APORTE RELEVANTE En el 2018, las empresas de subcontratación aportaron 9,600 millones de pesos al Instituto del Fondo Nacional de Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
Esto representó 4% del total de las aportaciones y las amortizaciones de la dependencia, es decir, lo que pagaron patrones y empleados.
Según el subdirector del Infonavit, Luis César Priego Valdez, las aportaciones provinieron de más de 5,500 compañías dedicadas a la tercerización, también conocidas como de outsourcing.
Esas organizaciones tienen una gran responsabilidad y oportunidad para apuntalar la economía de México, señaló en el evento.
El Infonavit depende de sus pagos, por ello «es de suma importancia» la creación de empleos formales «y que las empresas eviten la simulación y la evasión de sus responsabilidades», expuso.
En el país hay entre 3.5 y 5 millones de empleos tercerizados, informó Gabriel Aparicio Segovia, presidente de la AMECH.
Aparicio Segovia enumeró las ventajas de la subcontratación, la que respeta los derechos de los tra bajadores,aclaró.
Dijo que fomenta el empleo formal, contribuye al financiamiento del Infonavit o del Instituto Mexicano del Seguro Social, eleva la productividad de las empresas contratantes e impulsa la transferencia de conocimiento al traer a personal temporal.
Aseguró que representa una opción para el primer empleo de jóvenes recién egresados o para puestos de trabajo temporales.
Indicó que el outsourcing también coloca a colaboradores en posiciones gerenciales y directivas.
Es necesario un correcto marco regulatorio que «promueva, facilite e impulse la flexibilización del mercado laboral» y que incluya todas las formas de trabajo no tradicionales.
En el 2018, las empresas de subcontratación aportaron 9,600 millones de pesos al Infonavit, 4% del total de las aportaciones: AMECH.
Funcionarios y especialistas participaron en un foro sobre tercerización organizado por la AMECH.
(Fuente: El Economista, Información ,Empresas y Negocios ,G. Hernández, P20, 26/06/2019)