No es ningún secreto que la relación bilateral México-Estados Unidos es una de las más ricas y complejas a nivel global. Es compleja porque involucra mucho más que un límite entre países: es una de las fronteras más extensas del mundo (posee una distancia en kilómetros similar a la que hay entre Barcelona y Kiev). A través de esta frontera, se lleva a cabo el intercambio comercial más importante a nivel global; además conlleva temas controvertidos como migración, seguridad y sustentabilidad. Durante los últimos 20 años, la relación bilateral se había enmarcado en gran parte por el TLCAN, el cual impulsó la creación de muchos canales institucionales entre México y Estados Unidos. Había grupos de trabajo que reunían a los gabinetes, a la par que se promovía el intercambio comercial y las cadenas globales de valor. Con la transición del TLCAN al TMEC las empresas vivieron altibajos de certidumbre durante cerca de tres años. El comercio siguió creciendo —13,000 mdd de México a EU en 2019—, motivado principalmente por la guerra comercial entre China y EU. Los años 2018 y 2019 fueron buenos para la atracción de inversión para México, resultado de reformas que flexibilizaron ciertas industrias como la de telecomunicaciones y la energética. Después de esa etapa de dudas, tenemos frente a nosotros una nueva ola de certidumbre. Con el TMEC la región tiene reglas del juego claras firmadas por los tres países. Éste es un tratado moderno,que incluye a sectores que necesitaban marcos novedosos, como el sector financiero, el de comercio electrónico y el aeroespacial, por nombrar algunos.Incluso el TMEC fija reglas mucho más claras y específicas para la industria automotriz. Sin embargo, la pregunta importante aquí es: ¿esto será suficiente para que México cree nuevas industrias, fortalezca las ya establecidas y atraiga más inversiones? La respuesta es no. El TMEC es necesario, pero no suficiente para salir de la compleja crisis que estamos viviendo y la que está por venir. No hay certidumbre en México para operar de manera competitiva, comenzando por el estado de derecho e infraestructura, hasta seguridad. Hay otros temas pendientes en la agenda comercial de México, como las MiPyMEs. Tan solo el 5% de las PyMEs del país están involucradas en un proceso de exportación, cuando sabemos que las empresas exportadoras tienen mejores rendimientos y salarios para sus trabajadores que las no exportadoras. Internamente debemos llenar los eslabones pendientes en las cadenas globales de valor mediante tres estrategias: primera, buscando a las empresas que ya lo hacen en otros países para que se establezcan en México y se conecten a nuestras cadenas globales de valor; la segunda,creando alianzas y atrayendo el conocimiento; y la tercera, desarrollando la industria en el país fortaleciendo a las PyMEs para que se incorporen a las cadenas globales de valor. Si no logramos esta tarea, nuestra industria quedará vulnerable. ¿Cuáles son las oportunidades que trae el TMEC? Hay una ventana de oportunidaden la atracción de aquellas inversiones que se habían ido a Asia, y que están regresando a Norteamérica. En ese sentido, debemos promover la región de manera coordinada con EE. UU. y Canadá; cuando una empresa asiática invierte en Silao, Ontario u Oklahoma, la región se fortalece. Promovernos como Norteamérica es algo que no se ha hecho antes, y eso debe cambiar; debemos promovernos a nivel global como la región más competitiva y con el futuro más promisorio. Otra oportunidad radica en el talento. Antes, competitividad era la capacidad de los países de atraer y retener inversiones;ahora, la competitividad es la capacidad de los países de atraer y retener talento.El sector de servicios está basado en el talento; para fortalecer éste, el país debe capacitar a su capital humano o atraer nuevo de otras naciones. En este último aspecto, México es uno de los países que menos extranjeros tiene viviendo dentro del país;de acuerdo con la ONU, en México viven 2 millones de extranjeros; si lo comparamos con Texas, que tiene 4.5 millones, se entiende el problema.¡Es hora de que México se abra al talento! Te puede interesar Buscan evitar denuncias por incumplir T-MEC con nuevo portal /MER K-2 ¿Cómo veo al TMEC en 2040? Me gustaría ver a México totalmente integrado a Norteamérica y el TMEC es un buen camino para ello. Quisiera que hubiera más movilidad de trabajadores; que en 2040 México pueda mandar a miles de trabajadores temporales a trabajar a Estados Unidos y Canadá; y viceversa; además que, como región, seamos autosuficientes energéticamente usando fuentes renovables. Esperaría que México sea un país con infraestructura nueva y de alta calidad, con gente capaz tomando las decisiones que nos lleven a tener certidumbre, y que se cumpla el estado de derecho. Pero, sobre todo, le apuesto a los emprendedores mexicanos, quienes son historia de éxito en el país y el mundo -desde el sector Fintech, hasta el sector de las industrias creativas y de servicios digitales. – De éstos y otros temas dialogaremos en Industrial Transformation México, la Hannover Messe en México y América Latina, que tendrá como sede virtual a Poliforum León, Guanajuato,y que se llevará a cabo del 28 al 30 de octubre de 2020.
Fuente: El Heraldo de México / Internet, Información, 01:56, 21/08/2020