Pese a conocerse los términos de la reforma fiscal de Estados Unidos, el panorama económico para las empresas mexicanas que tienen operación en ese país no se aclarará hasta saber qué pasará con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC). David Cuéllar, socio líder de Impuestos y Servicios Legales de PwC en México, expuso que es innegable que los cambios fiscales en EU repercutirán en el País, con afectaciones directas para las empresas cuya operación depende de EU.
Indicó que, en conjunto, la inversión directa e indirecta de EU a México representa más de la mitad del total de inversión extranjera que recibe el País, lo que lo convierte en el principal socio comercial.
Sin embargo, el impacto total que tendrá la reforma fiscal para las empresas mexicanas con subsidiarias en EU no se verá con claridad hasta saber a qué términos se llega con el TLC.
Por ello, resulta importante evaluar los efectos de la renegociación del TLC y la reforma fiscal de EU en conjunto, dijo.
«Hoy ya sabemos qué sucedió con la reforma fiscal de Estados Unidos, todavía no sabemos qué va a pasar con el TLC y por ende todavía no sabemos cuáles son las respuestas del Gobierno federal en concreto en México», dijo.
Esta evaluación en conjunto inclusive resulta indispensable para conocer con certeza hasta qué punto México pierde o gana competitividad con la reforma fiscal.
Aseguró que la incertidumbre sigue siendo la principal preocupación para estas empresas, tanto mexicanas con operación en EU, como estadounidenses con operación en México.
Fuente: REFORMA, Negocios, 18/01/18