Alertan analistas alto costo por reaccionar precipitadamente. Descartan salida rápida de inversiones por cambios fiscales si no actúa México. En el momento en que en México se evalúen qué efectos tendrá la reforma fiscal en Estados Unidos, así como las políticas que se habrán de emprender para paliar los impactos, se debe ser cuidadoso y no exagerar, dijo Héctor Villarreal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

«Hay que analizar los detalles técnicos. Si bien si hay una reducción importante en la tasa impositiva para las empresas (del 35 al 21 por ciento) , también se quitaron muchas deducciones, lo cual quiere decir que la reducción de la tasa efectiva no es de 14 puntos. Sí va a ser grande, pero no es tanto.

«Ante esto hay una propuesta que dice que México debe de homologar casi de inmediatamente las tasas porque si no se va a perder mucho, pero la verdad que no es así, porque cuando hay cadenas de producción y procesos tan integrados, la inversión no se va de la noche a la mañana, además que todavía hay una estructura de costos ventajosa en el País», explicó Villarreal.

Si bien es necesario plantear una nueva reforma fiscal para el País, esta no debe hacerse apresurada ni al vapor, sino que tendría que evaluarse todos los factores para evitar que haya una erosión impositiva.

«Es muy probable que el paquete económico de 2019 tenga que tener ajustes. Pero ahora, hacer un cambio muy reaccionario podría salir muy caro», precisó el director del CIEP.

En tanto, Luis Foncerrada, director general del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) coincidió que en México no hay margen fiscal para reaccionar de manera inmediata a la aplicación de la reforma.

Añadió que si en México se redujera la tasa del ISR llevaría a bajar los ingresos del gobierno, por lo tanto se tendrían que tomar medidas para no incrementar la deuda. Foncerrada dijo que esto significaría que el gobierno dejara de gastar.

Entre el sector privado ha surgido la exigencia de que el gobierno mexicano reaccione con medidas espejo ante los cambios fiscales que se aplicarán en el país vecino. Coparmex propuso que la tasa de ISR se reduzca de 30 a 24 por ciento.

«Esto de la política espejo es una reacción un poco precipitada», agregó Foncerrada.

Por su parte, Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, afirmó que México debe prepararse ante el impacto que generará la reforma fiscal estadounidense, pero no de inmediato.

En la presentación del informe «Panorama Social de América Latina 2017» en la Ciudad de México, recordó que hay que analizar con detenimiento esta reforma, porque pese a la rebaja impositiva federal, se habrán de sumar impuestos estatales y locales, por lo que la diferencia no será tan marcada.

Con información de Cesar Martínez.

CAMBIO DRÁSTICO

El legislativo estadounidense aprobó la reforma fiscal más drástica que ha tenido su país, la cual entrará en vigor en 2018. Le costará al gobierno de EU dejar de recaudar 1.45 billones de dólares entre 2018 y 2027 a cambio de impulsar la expansión económica.

Aquí, los principales puntos con su efecto económico para México y el mundo.

EMPUJA A CORPORATIVOS

  • Baja la tasa a corporativos de 35% a 21%, elimina el Impuesto Alternativo Mínimo y establece deducciones a pequeños negocios o de un solo propietario.

Efecto: Es una reducción histórica para los multinacionales y será muy atractivo para muchas de ellas porque además no tendrán que enfrentar un impuesto mínimo, el cual era una protección del fisco estadounidense contra las estrategias de evasión agresivas.

En general, pone en desventaja al sistema fiscal mexicano para atracción de inversiones.

INCENTIVA REPATRIACIÓN

  • Se establece un impuesto atractivo para que las empresas de EU regresen a su país las ganancias que tienen en el extranjero. Aplicará una tasa de 8% sobre activos no líquidos (por ejemplo, equipo) y 15.5% sobre activos líquidos como efectivo.

Efecto: Está dirigido sobre todo a las inversiones off shore y podría crear un gran flujo de capitales hacia EU y mover los mercados financieros. Esto fortalece el dólar frente a otras monedas, lo que afecta al peso mexicano.

ALIVIA A CIUDADANOS DE MAYOR INGRESO

  • Baja la tasa máxima de impuestos que pagan ciudadanos de 39.6% a 37%, un beneficio que expira en 2025. Beneficia sobre todo a solteros con ingresos superiores a 500 mil dólares y matrimonios con más de 600 mil dólares.
  • Se duplica el monto exento de pago de impuesto a patrimonio: de 5 a 11 millones de dólares en solteros y 11 a 22 millones de dólares en matrimonios.
  • Limita la deducción de créditos hipotecarios.
  • Limita a deducción de impuestos estatales y locales a 10 mil dólares.

Efecto: Podría generar una reactivación en el consumo de hogares en EU y eso le convendría a México porque es su principal mercado de exportación. Sin embargo, las medidas benefician principalmente a familias de mayor ingreso y podría afectar a ciudadanos que viven en estados con más impuestos locales.

  • El Centro de Política Tributaria de EU calcula que los hogares de ingreso medios tendrán un recorte de impuestos promedio de 900 dólares por año, mientras que el 1 por ciento de hogares más ricos, pagarán, en promedio, 51 mil dólares menos por año.

VARIOS

  • Permite la perforación de petróleo en el refugio nacional de vida silvestre del Ártico de Alaska.
  • Elimina la obligación de que todos los estadounidenses tengan seguro de salud, por lo cual se reducirán los fondos públicos destinados a este programa y se dará pie a terminar con los programas de salud de Obama.

Fuente: Cámara de Representantes EU y Centro de Política Tributaria

Fuente: REFORMA, Negocios, 21 diciembre, 2017