Con el nuevo T-MEC, inversionistas estadounidenses tendrán que acudir a tribunales mexicanos para solucionar controversias y eso inhibirá la inversión en el País. Esto concluye el análisis de la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (USITC) sobre los efectos que tendrá el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
En su documento “USMCA: impacto probable en la economía de los EU y en sectores industriales”, dado a conocer al cierre de la semana, explica la afectación que tendrá la modificación al capítulo 14 del Tratado.
Ese capítulo existe hoy en el Tratado de Libre Comercio (TLCAN) y analiza la solución de controversias entre Estado e inversionista.
El mecanismo conocido como ISDS (Solución de disputa inversionista-Estado, por sus siglas en inglés) otorga a los inversionistas extranjeros el derecho de acceder a un tribunal internacional para resolver disputas con un país anfitrión.
Sin embargo, en el T-MEC se estableció que solo podrá ser usado de manera directa por inversionistas de cinco sectores: petróleo y gas natural, generación de energía, telecomunicaciones, servicios de transporte e infraestructura.
El resto podrían recurrir a los tribunales internacionales, pero antes deberá agotar los recursos internos mexicanos para resolver sus disputas o pasar al menos 30 meses intentándolo.
“Se espera que las inversiones de EU en México y la actividad de sus filiales extranjeras allí, excepto en los cinco sectores mencionados, se reduzcan como resultado de los cambios en las disposiciones”, detalla.
Agrega que si se da alguna controversia por la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), se usaría el capítulo 14.
Fuente: Reforma, Sección Negocios, Abril 22, 2019