Los precios de los productos alimentarios que se comercializan a nivel mundial bajaron en noviembre, liderados por fuertes caídas del aceite de palma y otros aceites vegetales, informó hoy la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). El índice de precios de los alimentos de la FAO tuvo un promedio de 160.8 puntos en noviembre, un 1.3 por ciento menos que en octubre y un 8.5 por ciento más bajo respecto a un año antes.
El índice -una medida de la variación mensual en los precios internacionales de una canasta de productos alimentarios- se encuentra en su nivel más bajo desde mayo de 2016.
El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO alcanzó un mínimo de 12 años, bajando un 5.7 por ciento en relación a octubre. Los abundantes inventarios de aceite de palma y los amplios suministros de aceites de soja y girasol están detrás de este descenso.
El índice de precios de los cereales de la FAO -que abarca trigo, cereales secundarios y arroz- cayó un 1.1 por ciento en noviembre, lo que refleja una gran cantidad de suministros exportables de trigo, una mayor competencia de las exportaciones de maíz y la llegada de las nuevas cosechas de arroz.
El índice de precios de los productos lácteos de la FAO descendió por sexto mes consecutivo, cayendo un 3.3 por ciento respecto a octubre, ya que las abundantes existencias y la mayor disponibilidad de suministros de exportación -especialmente de Nueva Zelanda-, llevaron a cotizaciones de precios más bajos para la mantequilla, queso y leche entera en polvo.
El índice de precios del azúcar de la FAO desafió la tendencia a la baja, subiendo un 4.4 por ciento en el mes. El aumento se debió sobre todo a un importante descenso de la producción esperada en Brasil, que también ha reducido la proporción de caña de azúcar utilizada para producir azúcar al 35.8 por ciento, desde hace casi medio año.
El índice de precios de la carne de la FAO bajó ligeramente, ya que solo los precios de la carne de bovino se incrementaron durante el pasado mes.
La FAO publicó también una nueva Nota informativa sobre la oferta y la demanda de cereales, que fija su pronóstico para la producción mundial de cereales en 2018 en 2 595 millones de toneladas, cerca de un 2.4 por ciento por debajo del nivel récord alcanzado el año pasado.
Las nuevas previsiones no incorporan las importantes revisiones históricas hechas recientemente por China sobre sus estimaciones de producción de cereales -en particular para el maíz-, que están siendo analizadas por la FAO con miras a las evaluaciones actualizadas de principios del próximo año.
La producción mundial de arroz sigue este año su curso para alcanzar un nuevo récord de 513 millones de toneladas, lo que representa un aumento del 1.3 por ciento respecto a 2017.
Por el contrario, la FAO ha rebajado su pronóstico para la producción mundial de trigo a 725.1 millones de toneladas, debido a cosechas más reducidas de las esperadas en Turquía y la Federación de Rusia. La proyección para la producción mundial de cereales secundarios también se redujo -a 1,357 millones de toneladas- debido a las revisiones a la baja de las producciones de cebada y sorgo.
La FAO estima que habrá una mayor siembra de cultivos de trigo de invierno en el hemisferio norte, así como una mayor producción de maíz en gran parte del hemisferio sur, aunque las perspectivas de un posible evento de El Niño perjudican las perspectivas en Sudáfrica y los países vecinos.
Se espera además que la utilización mundial de cereales durante la temporada 2018/19 crezca en un 1.3 por ciento -a 2,649 millones de toneladas-, impulsada por un mayor uso industrial y para piensos del maíz.
Por otro lado, se pronostica que las existencias mundiales de cereales se mantengan en 762 millones de toneladas al cierre de las temporadas en 2019, un 6.5 por ciento por debajo de sus niveles máximos de apertura.
Se prevé que los inventarios de maíz se contraigan en un 14 por ciento, mientras que las existencias de trigo deberían disminuir en al menos un 12 por ciento. Por el contrario, se espera que las existencias mundiales de arroz aumenten un 2.7 por ciento, para alcanzar un máximo histórico de 177 millones de toneladas.
Respecto al comercio internacional de cereales, está prevista una contracción en 2018/19, aunque esta disminución -estimada en el 1.1 por ciento- es menor de lo que se anticipó en noviembre.
(Fuente: Notimex / Distrito Federal / Internet, Información, 06:01, 06/12/2018)