La imposición del pago de aranceles a productos de exportación entre Estados Unidos y México, como parte de las medidas de presión para la renegociación del tratado comercial T-MEC, afecta principalmente a los consumidores. La firma de contadores públicos Salles Sainz Grant Thornton (SSGT) mencionó que el ejemplo más destacado surgió con la medida que impuso Estados Unidos, al incrementar a 25% y 10% los aranceles a las importaciones de acero y aluminio de México.
El socio especialista en Comercio Exterior de SSGT, Mario Echagaray, refirió que para contrarrestar el efecto económico de dicha medida y subsanar los cientos de millones de pesos que se estaban perdiendo, México impuso aranceles a la importación de diversas mercancías originarias de Estados Unidos.
Dichos aranceles estuvieron vigentes de junio de 2018 a enero de 2019, pero a partir del 25 de marzo de 2019 se volvieron a imponer, principalmente a mercancías del sector siderúrgico, agregó.
La medida tomada por EUA, de imponer aranceles al acero y aluminio mexicano, tiene un impacto más directo para el consumidor estadounidense, pues se convierte en un efecto dominó.
Esto, ya que al encarecer los insumos se reflejará en el precio del producto final, ya que será más caro para el consumidor estadounidense; sin embargo, también afectará a México.
«Lo anterior, eventualmente ocasionará que disminuyan las exportaciones de acero a Estados Unidos, país que aunque es un importante productor de acero no logra cubrir su demanda nacional y por ello recurre a la importación», indicó Echagaray.
Se espera que en abril la Comisión de Comercio de Estados Unidos emita su informe sobre las implicaciones económicas del T-MEC, el cual será enviado al Congreso norteamericano para su discusión y aprobación en su caso.
(Fuente: El Horizonte/Nuevo León, Información ,Finanzas ,Redacción, P8, 16/04/2019)