El «robo hormiga» a establecimientos comerciales, representa pérdidas anuales aproximadas a 14 mil millones de pesos a los comercios establecidos, de acuerdo a la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales. Esta cifra, durante el último trimestre del año se estima puede incrementar hasta un 40% de acuerdo con el Frente Nacional de Seguridad.
En este contexto, la empresa especializada en seguridad. Grupo Multisistemas, propone implementar medidas preventivas, independientemente de las reactivas. Para mitigar este delito no basta con poner un empleado en la puerta para ver quién entra o quién sale.
Se necesita personal capacitado y especializado en la detección de farderos, que además pueda apoyarse en tecnología adecuada para este tipo de servicios.
Además, en las temporadas de altas ventas, como Navidad y Año Nuevo, para los comercios, también les ha significado ser un blanco fácil de la delincuencia, en virtud de las aglomeraciones que se generan en esos lugares, por lo que es conveniente reforzar la seguridad en estos casos.
La sofisticación de la delincuencia llega a extremos de utilizar a niños para distraer la atención de sus hurtos, por una parte, y evadir el seguimiento de cámaras.
Por ello, deben tener sistemas de control como etiquetas para alertar el paso de mercancía robada por los arcos detectores.
Desafortunadamente, para el consumidor, el comerciante tiene que pagar el precio de la seguridad.