La salida de Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) propiciará una menor participación de las exportaciones estadounidenses agrícolas en México y Canadá, concluyó un análisis del Congreso estadounidense. El abandono del TLCAN ocasionaría mayores aranceles a las exportaciones e importaciones agrícolas de Estados Unidos, y podría resultar en la eliminación de las preferencias comerciales entre Estados Unidos, Canadá y México, dado que los productos comerciados podrían revertirse a aranceles de Nación Más Favorecida (NMF).
Los mayores aranceles de NMF podrían hacer que los productos agrícolas estadounidenses sean relativamente más costosos, mientras que los productos competidores de otros países podrían ser más competitivos en cuanto a los precios, especialmente entre los países con los que Canadá y México tienen TLC o preferencias comerciales.
Según el análisis, el mayor costo de los productos estadounidenses podría impulsar a Canadá y México a diversificar sus fuentes de productos o buscar mercados alternativos por otras razones, incluida la pérdida de confianza y confiabilidad en las políticas y compromisos comerciales de Estados Unidos.
Los aranceles de NMF más altos y la pérdida de preferencias comerciales podrían elevar los precios al consumidor estadounidense y reducir las opciones de productos, al mismo tiempo que aumentarían los costos de los bienes intermedios, insumos e ingredientes importados utilizados en la producción y fabricación de valor agregado de Estados Unidos.
Paralelamente, los aranceles de NMF más altos en los productos importados de Estados Unidos podrían hacer subir los precios y reducir las importaciones de algunos productos agrícolas que actualmente son más competitivos con los precios o que compiten con algunos productos estadounidenses, como las frutas y hortalizas de temporada importadas de México.
Otra consecuencia sería que las relaciones establecidas entre los productores y fabricantes estadounidenses de alimentos y sus homólogos canadienses y mexicanos podrían complicarse por la pérdida de preferencias comerciales relacionadas con el TLCAN y un aumento de ciertos obstáculos no arancelarios al comercio, incluidas medidas sanitarias y fitosanitarias (MSF), aranceles aduaneros, permisos, cuotas, regulaciones comerciales, licencias de importación y restricciones fronterizas.
La retirada del TLCAN podría dificultar la planificación de los sectores agrícolas de Estados Unidos. La eliminación de otros tipos de preferencias comerciales destinadas a facilitar el comercio, por ejemplo, las MSF y otros mecanismos no arancelarios de resolución de disputas, también podría interrumpir el comercio y complicar la planificación comercial.
Una consecuencia más estaría en que Estados Unidos podría disminuir su capacidad para influir en los términos de intercambio y las políticas y regulaciones relacionadas con el comercio, incluidas las cuotas de medidas sanitarias y fitosanitarias y las leyes de seguridad alimentaria relacionadas, entre otros tipos de barreras no arancelarias, así como prácticas y normas ambientales y laborales transfronterizas.
amhpac ve un 2018 positivo
Exportaciones de hortalizas se mantienen pese a incertidumbre
La incertidumbre en el marcado mexicano, incrementada en meses recientes por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no ha afectado las exportaciones de hortalizas Estados Unidos, estimó la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida (AMHPAC).
Hasta ahorita, cuando menos con los socios productores de la AMHPAC, no se han inhibido las inversiones ni lo que hemos venido cultivando y produciendo en todos los ciclos agrícolas”, enfatizó el director general de la asociación, Alfredo Díaz Belmontes.
Estadísticas de este organismo muestran que más de 50% de las hortalizas consumidas en Estados Unidos son enviadas por los productores de México, toda vez que entre ambos países aún se tienen convenios establecidos, refirió.
Sin embargo, el dirigente manifestó su preocupación ante lo que pudiera venir durante el proceso de renegociación entre los representantes de México, Estados Unidos y Canadá, sobre todo porque “todos los días nos cambian las expectativas dependiendo del tuit del día”.
Si bien el 2017 resultó un año malo para los 240 socios productores de hortalizas de la AMHPAC, al haber tenido precios “muy deprimidos” porque descendió la oferta de los productos agropecuarios, este 2018 será mejor a pesar del panorama negativo que se pronostica en la economía, previó Díaz Belmontes.
(La situación actual del acuerdo tripartita) nos está sacando de la zona de confort que nos daba el mercado más grande y poderoso del mundo, el americano, pero vamos a continuar en Estados Unidos, con o sin aranceles, de eso no hay duda”.
Explicó que México y Florida son los principales proveedores de tomate rojo fresco para el mercado estadounidense y, aunado a la buena producción registrada durante el ciclo pasado, “los mercados se inundaron (de la hortaliza)”. (Notimex)
(Fuente: El Economista / Internet, Información, 01:30, 16/01/2018)