Con los incentivos fiscales que se aplican en la zona libre de la frontera norte del país —disminución del Impuesto sobre la Renta (ISR) a 20% y del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a 8%— quedan desprotegidos algunos municipios al sur de dicha región. En el marco del Foro Regional sobre el análisis del Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2024, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, aseguró que todas las entidades federativas van a tener una baja en el gasto federalizado, a través de la recaudación, porque la Federación recibirá menos ingresos por estos incentivos.
“Lo he hablado con el presidente (Andrés Manuel López Obrador). Todos vamos a tener una baja de recaudación porque la Federación va a recaudar menos y además eso le va a pegar a los municipios del sur (de cada entidad) y a los de todo el país”, dijo.
Por eso estoy proponiendo incluir en el PND una reforma hacendaria para no descuidar la prestación de servicios”, indicó el mandatario. Lo que Nuevo León propone, comentó, es que en el documento se realice una radiografía completa del país y no sea sólo un plan político, sino administrativo, fiscal, de infraestructura y desarrollo de las regiones.
“Hay que gerenciar las decisiones de los gobiernos y que administrativamente pueda haber mayor facilidad para que el ciudadano pueda crecer”, mencionó el Ejecutivo estatal. Por su parte, el diputado de Morena, Mario Delgado Carrillo, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, comentó a El Economista que en el caso de los incentivos en la frontera debe haber un límite territorial, de lo contrario se tendría que ofrecer a todos los municipios del país.
El presidente dijo desde la campaña cuál sería el límite de beneficios fiscales. Lo más importante de esta medida es que funcione y que vuelva más atractiva la franja fronteriza para las inversiones, ése es el objetivo que busca el gobierno de la República”, aseveró. Reconoció que en el corto plazo bajará la recaudación, pero se compensará con la llegada de más inversión y crecimiento económico en la frontera norte. Mario Delgado ofreció una conferencia a los socios del Colegio de Economistas, a quienes comentó que en el PND se ve a los proyectos de infraestructura como una palanca del desarrollo regional del sur-sureste, debido a que esta zona crece de manera más baja que el resto de México.
Por ello se quiere desarrollar el Tren Maya, así como el Tren Transístmico, con una lógica de comercio exterior para ofrecer una alternativa al Canal de Panamá y para contar con gas y petróleo en la refinería de Dos Bocas. Sobre si el Corredor Transístmico sustituirá a las Zonas Económicas Especiales, comentó que este proyecto regional incluye al Istmo, así como las conexiones de gas, y es un territorio con impuestos especiales. “Es un proyecto que va a sacudir al sur-sureste para que tenga desarrollo económico (…) No es un proyecto de infraestructura ferroviaria, es un proyecto de integración regional”, recalcó. Consideró que la estrategia del gobierno federal está muy diferenciada entre el norte y sureste, ya que en la frontera con Estados Unidos hay incentivos para continuar con el desarrollo económico y en el sureste la infraestructura impulsará el crecimiento regional.
(Fuente: El Economista / Internet, Información, 00:45, 14/06/2019)