Aunque ha quedado más que claro que una vez que entre en operación el Cobro Digital (CoDi) que usa el código QR no veremos un cambio significativo en la inclusión financiera o en la bancarización que tiene México, hay la esperanza de que al menos se sienten mejores bases tecnológicas para incluir a más personas al sistema financiero y sobretodo, sin que tengan que pagar comisiones onerosas. Este 31 de julio venció la primera parte del plazo impuesto por el Banco de México (Banxico) para los participantes del sistema que usarán CoDi y en el que los principales bancos han ido cumpliendo con los requerimientos, pero también lo han hecho otras instituciones como Sociedades Financieras Populares (Sofipos) que muestran avances a la par de los bancos, lo que significa la importancia que le están dando a esta plataforma que se prevé entre en operación en el último trimestre de este año.

Desde el 29 de abril comenzó una fase de prueba de CoDi al cual llamaron ‘piloto productivo’ en el que algunas instituciones financieras participantes del SPEI realizan de manera voluntaria operaciones reales de CoDi en un ambiente limitado a ciertos clientes y zonas geográficas específicas.

A partir del 18 de julio comenzó lo que es la segunda etapa del piloto productivo de CoDi en donde ya se enrolaron a comercios y usuarios del sistema financiero así como operaciones reales en las ciudades de La Paz en Baja California, en Progreso, Yucatán y Tulancingo en Hidalgo, el cual a decir de unos participantes fue positivo, pero se vio que en el caso de los pequeños comercios que hay resistencia a usar este sistema, dado que al estar ligada a una cuenta bancaria, todos saben que los ingresos terminan siendo fiscalizados y pagar impuestos no es aún tan atractivo.

Llama la atención también que en estas tres ciudades participaron sólo BanCoppel, Santander, Pagatodo y FinComún y otras instituciones sólo lo hicieron en una o dos, es decir son todavía pocas las instituciones que están siguiendo el proceso que instauró el banco central, aún así los grandes bancos aseguran que ya están listos y estarán entrando en septiembre de forma completa para operar el CoDi. Parte interesante es que aun cuando los bancos con más de tres mil cuentas deben ofrecer CoDi de manera obligatoria, llama la atención que hay hasta ahora 14 instituciones que de manera voluntaria iniciaron el proceso para participar, como algunas Fintech como Kuspit o bancos de menores tamaño o Sofipos como Caja Libertad que tiene planeado incorporarse en enero del 2020.

Sin embargo, pese a todos estos avances, los participantes reconocen que la informalidad es uno de los grandes temas a combatir para que el CoDi pueda permear entre los pequeños negocios, en  tianguis y en las ciudades más pequeñas, además de la conectividad para que pueda usarse de forma exitosa y cumplir con el objetivo de que en un celular puedan realizarse operaciones básicas, transferencias y depósitos leyendo un código QR, en donde los bancos hasta ahora mantienen la promesa de no cobrar comisiones, y en el caso de los negocios que está sea muy baja, esperemos que así sea y no se convierta en un futuro “elefante blanco” tecnológico.

Y en el otro lado de la moneda, si algo seguiremos viendo en este sexenio es la innovación y los cambios de la banca por ir de la mano del nuevo gobierno y llegar no sólo con CoDi a más personas, sino también ahora participan activamente en el “Programa de Desarrollo de las Cuencas Lecheras” en donde el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Niño de Rivera, y el gobernador del estado de Chiapas, Rutilio Escandón Cadenas ya se han reunido para platicar del objetivo que consiste en que en el corto plazo cuenten con mejores ingresos provenientes de una mejor alimentación al ganado. La banca comercial busca apoyar junto con la banca de segundo piso el proyecto. Por lo pronto, la moneda está en el aire.

(Fuente: El Financiero / Distrito Federal / Internet, Información, 04:50, 01/08/2019)