La iniciativa privada analiza las propuestas sobre la reforma laboral que pretende presentarse como iniciativa en el Congreso de la Unión; sin embargo, hay preocupación porque «la impartición de justicia se convierta en un problema muy complejo en su aplicación», dijo Lorenzo Roel, presidente del Comité Laboral de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex). En representante laboral explicó que hay temas como la rescisión de contrato, pues «se revierte la carga probatoria del despido», lo que significa que no se da oportunidad al patrón de presentar los argumentos por los que dio de baja a un trabajador, y eso «afectará sobre todo a los pequeños y micro empresarios», apuntó.
Sostuvo que el aviso del término de la relación laboral «así como está redactado es muy complejo, porque hay ocasiones que se tiene que reinstalar al trabajador y allí es donde se presentan los argumentos por los que se dio de baja; sin embargo, ahora se está cambiando y entendemos que es con el fin de que no haya mas de dos juicios y eso está bien, pero hay que ajus tarloa las necesidades de la dinámica laboral».
Roel detalló que para la iniciativa privada es importante participar ahora en la discusión de las leyes secundarias relacionadas con los cambios a la Ley Federal del Trabajo «si no lo hacemos ahora, cuando llegue al Congreso será mucho más complicado hacer cambios, y lo que buscamos es que se pueda tener una buena legislación, que no afecte a los mayores empleadores del país, que no son las grandes empresas, sino, las micro y pequeñas».
CUMPLE PROPUESTA CON LAS NUEVAS OBLIGACIONES DE MÉXICO El especialista laboral, Ricardo Martínez Rojas, detalló que el borrador de las leyes secundarias es perfectible; sin embargo, admitió que cumple con lo que ordena la Constitución – reforma realizada en febrero de 2017- y permite cumplir al país con varias obligaciones.
«Cumple con la Constitución, luego con el Convenio Internacional del TPP, también con Convenio 98 e incluso con el Anexo 23A del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (TMEC), y que en todos te lleva a la negociación colectiva efectiva», explicó el socio de la firma De la Vega & Martínez.
Agregó que el modelo que se pretende utilizar en México es muy similar al norteamericano, «que consiste en que el sindicato para poder presentar un Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) y para poder empezar a huelga por firma de un CCT o tener la titularidad del un CCT de otro sindicato, necesita sacar un documento que se llama Certificado de Representatividad que requiere del 30% de los trabajadores que quieran el contrato colectivo».
Asimismo dijo que la propuesta que se analiza en los diferentes sectores «puede ayudar a eliminar la extorsión para la firma de un CCT y ayuda a eliminar la simulación de un contrato colectivo de protección; además de que ayuda a que no haya titularidades de mentiras, que no sean sindicatos simulados que en muchas ocasiones dan pauta a mucha corrupción».
Para la incitativa privada es importante participar ahora en la discusión de las leyes secundarias, si no lo hacemos ahora, cuando llegue al Congreso será mucho más complicado hacer cambios».
(Fuente: El Economista, Información ,Primera Plana ,Mana del Pilar Martínez, P1, 06/11/2018)